martes, 2 de enero de 2018

Exaduro

Contra el viento
Diciembre de 2017

Esta escultura surge un día de playa con fuerte viento de levante y un pañuelo de seda que te atrapa y lucha para no ser arrastrado por el viento...



Me vinieron a la mente las maravillosas esculturas con velo transparente, como las de Giovanni Strazza y me pareció una imagen poderosa, con mucha fuerza y a la vez, un reto. 

Aunque esta escultura haya quedado muy lejos de acercarse a esas obras de velo transparente,  el resultado creo que ha sido bastante positivo.



Para empezar hay que hacer el  boceto en plastelina de modelar.





Después, en función del tamaño que se le quiera dar a la pieza final, se calculan las medidas para realizar el eje principal de la figura con alambre que se fija a una tabla de madera con unos clavos. Para completar la figura se utiliza malla de gallinero.




A partir de esta estructura se empieza a añadir barro y se le va dando forma a la figura con ayuda de palillos de modelar.


 


No se debe olvidar tapar la figura de barro con un paño húmedo entre las diferentes sesiones de trabajo para que el barro se mantenga fresco. Si se va a tardar más de dos días en volver a trabajar o si el ambiente es muy cálido, conviene además cubrirlo con un plástico para que se mantenga la humedad del paño.


Cuando la pieza está terminada hay que formar un eje  con chapas metálicas para dividir en dos partes la pieza. No es muy recomendable dividirlo en muchas piezas, pero si la complejidad de la figura lo requiere, se puede hacer. (en este caso, se han realizado cinco partes).



Se cubre con escayola para sacar el negativo de la misma, teniendo en cuenta dos cuestiones: 

1- La primera capa de escayola debe tener un poco de colorante para que en el momento de desmoldear la pieza sea más fácil diferenciar el negativo de la pieza final.
2- Hay que mantener la línea de las chapas siempre visible.

Finalmente, con esparto mojado en escayola, se pegan unos palos que servirán de asas para separar cada una de las dos piezas.

Cuando la escayola está seca, se aprecia la apertura por la linea central de chapas y poco a poco, retirando las chapas y tirando de las "asas" se consiguen separar las partes que forman el negativo de la pieza final.

Estas piezas deben limpiarse bien con agua para retirar los resto de barro o arcilla que pudieran quedar y aplicarles una mezcla de cera Alex con aguarrás, para que la pieza final se desprenda mejor del molde.




Unidas las piezas con alambres y un par de puntos de esparto con escayola, se cubre la línea de unión con escayola o arcilla y se coloca boca abajo para rellenarlo con la mezcla de exaduro. Para que no formen burbujas de aire que luego serán agujeros en la pieza final, conviene derramar el exaduro lentamente en el interior del molde, a poder ser desde uno de los laterales, para que vaya escurriendo y penetrando en todos los rincones y también es conveniente darle pequeños golpes/movimientos al molde mientras se vierte el exaduro.




Una vez que está seco, la escayola se retira con pequeños golpes de maza  y cincel, con cuidado para no dañar la pieza y tomando como referencia la primera capa de color que aplicamos con la escayola. En este momento también nos daremos cuenta del efecto que hace la capa de  cera Alex y aguarrás que dimos en las piezas del molde, ya que debe ser más sencillo que se desprenda.


   
Una vez retirada la escayola se lija, lima y pule la pieza.

Finalmente se prepara una filtración endurecedora (10 ml de resina epoxi para laminados, 4 ml de catalizador E432 y 10 ml de acetona) a la que también se le puede añadir algún tinte y se pincela toda la pieza con ella, secándola con un papel de manera inmediata a su aplicación, para evitar que salgan brillos.

  Se prepara el photocall y este es el resultado